Tras la prensa y entrenadores tocó el turno a ex futbolistas en las tertulias realizadas en la mañana de hoy en Medina Sidonia con motivo de la I Convención Cadista organizada por la Federación de Peñas Cadistas.

Con la participación de Juanito Mariana, Manolín Bueno, Pepe Mejías y Enrique Ortiz, se trató el cómo han ido evolucionando los vestuarios de los equipos de fútbol a lo largo del tiempo. Mariana destacaba sus etapas de las dos promociones disputadas con el conjunto amarillo en Eibar y en Sestao, una época dura pues como recordaba “a mí me tocó vivir la peor época del Cádiz. En aquellos años con esas dos duras promociones la camaradería en el vestuario era total”.

Manolín Bueno evocaba sus años de niños, tras nacer en el estadio del Cádiz. Comentaba que “mi madre decía que los futbolistas me quitaban de la teta para darme ya un balón”. Recordaba cuando con doce o trece años cuidaba el césped y el entrenador del primer equipo le decía que se pusiera las botas y se uniera el entrenamiento.

Ya más actuales, como es el caso de Pepe Mejías, hacía hincapié en la cantidad de jugadores gaditanos que poblaban el vestuario amarillo. “La mayoría eran de aquí y los que venían de fuera se adaptaban pronto. También la afición era de una media de edad más alta y más exigente. Lo mismo pasábamos de ser unos borrachos a ser triunfadores. Era una etapa diferente. Ahora la afición es más incondicional y sigue apoyando al equipo en los malos momentos”.

Por su parte Enrique Ortiz destacaba que para él era un honor estar rodeado de historia con la presencia de los otros tres ex futbolistas. “Yo he tenido la suerte y la desgracia de vivir momentos buenos y malos, pero la afición del Cádiz es especial. No hay ninguna como esta y somos unos privilegiados de tenerla”. Sobre la relación más allá de lo profesionalidad entre los futbolistas, “es algo que ahora es complicado de conseguir porque cada año cambia la mayor parte de la plantilla”.